jueves, julio 06, 2006

La locura lo cura

Ayer me subí al 38, pedí uno de 80 y me senté en la tercer fila de la derecha con las ínfulas de propietaria que otorga el lado de la ventanilla. Colgué los ojos en la calle sin hacer foco... que placer! El bondi es uno de los pocos lugares socialmente aceptados para volar, los ojos fijos y la mente suelta.
Mi grata estadía en los aires se vio interrumpida por una inoportuna frenada bestial (esas que dejan la marca en el asfalto y cuando la vemos pensamos: uyy acá se dieron un palo feo) y ya no puede remontar vuelo, es más fue el principio de un darme cuenta. Seguía con los ojos en la calle pero ahora veía un desfile de gente horrible: una mujer sacudía a un niño en la esquina de Corrientes y Talcahuano (¿serían madre e hijo?), aprovechando el rojo de un semáforo un hombre se masturbaba desde su auto eligiendo a una púber de musa inspiradora, un tachero enajenado lanzaba puteadas contra el mundo... y yo queriendo volar sin poder. Cuando me di cuenta tenía el ceño fruncido, los ojos secos, la garganta estrangulada. Tensión.
Volví los ojos hacia adentro y observé a un hombre conversar con la máquina de los boletos, él me miró y pensé: lo único que falta es que este tipo se me siente al lado y me delire todo el viaje...justo hoy me olvide el mp3!!; pero se sentó en el asiento de atrás y como buen habitante de otro mundo no necesitó mas de 5 minutos para leer las mentes de todos los pasajeros.
No sé bien si fue por el contacto visual previo o porque le cayeron simpáticos los rulos que se me forman en los días de humedad, pero decidió regalarme lo que necesitaba. Desde mi nuca silbó todo el viaje una melodía desconocida, como un arrullo, una interpretación luminosa... la música calma a las fieras pensé, y me reí con ganas de mí, de la situación, de los dos... su locura, lo-cura, me-curó.

5 comentarios:

Javier Delfino (javoc) dijo...

Una técnica para sonreir y calmar el alma (Aprendida de una de mis viejas maestras que ahora esta en la india) levante la nariz en el aire uélalo, levante el labio superior como un gato gruniendo. Dibuje una pequeña sonrisa. respire ondo y emita un soplido mezclado con un sonido de risa simulado exageradamente. funciona. Una sonrisa se dibujara en tu cara al principio será falsa pero en pocos segundos será real, verdadera y tuya. juro que funciona. sobre todo si obligas a hacerlo a otra persona que esta eniojada. ciao.

guido dijo...

Me mata cuando el bondi esta hasta la manija ver la guerra por los asientos. Todos al asecho esperando un hueco libre. Juego a mirar las peleas por el lugar de noche en el 60. LLeno de capital a provincia. Ah¡ siempre alguien desde atras le grita al colectivero: "Parada¡¡¡¡¡¡¡¡¡"

islander dijo...

Bueno, no voy a hablar otra vez pero en este blog de mi afición por los bondis, así que lo único que puedo decir al respecto es que si no estuvieran yo no tendría oficina.

Una vez hice una gráfica al respecto. Es la ventana del bondi vista desde adentro hacia el cielo (porque tiene un leve contrapicadito) y en el vidrio con fibra dice: "mi oficina tiene la vista más linda de todas".

No es una cosa de locoos!!?

jaja, aguante provincia Don Guido.

Mayra Gallucci dijo...

Chan que bueno lo de la foto! si la tenes en la compu me la mandas por mail? mayra_gallucci@hotmail.com

Besos
May

Anónimo dijo...

QUIEN POR 80 CENTAVOS TE DEDICA UNA HORA DE SU PROFESION HOY POR HOY?
QUE VIVAN LOS COLECTIVEROS, SUERTE DE
SHCUMIES Y CICERONES...BONDI DONDE UNO ESTUDIA, LEE, CAVILA, DECIDE O DUERME...O MIRA CULOS Y TETAS...