viernes, septiembre 15, 2006

Opera prima


Dormido detrás del personaje, supliendo un vacío
aullando la herida la furia hambrienta
y el dolor del piano ahogado te dobla los dedos.
Las manos que ignoran las curvas del cuerpo
saliva cruda, largos metros de piel
carne no recorrida
no tacto
no
La lluvia cae y se me parece
arrojada sin nombre
me fue negado
navegar por tus aguas
agua mil gotas,
mil suicidios aislados
sin charco.
Los rojos noche,
un molino y tu cortesana
la sangre incinerada en la palabra plexo
y en cada letra de solar,
sus rayos, el solsticio
empujar al sol
y darnos lugar.